martes, 10 de junio de 2008

¿Para qué los fantasmas del pasado?

Ya estamos de vuelta después de hacer el rústico un poco allí por mi pueblo. Como se nota que me voy haciendo mayor, ya no me recupero de los excesos tan rápido. Pero eso sí, he vuelto con otra cara, con otra sonrisa. Más tranquilo porque me he dado cuenta que la lluvia te afecta si tú la dejas y este fin de semana me he comprado un paraguas.

Sin tiempo para asimilar la vuelta ya estoy haciendo la maleta para irme a Zaragoza, pero por motivos de trabajo. ¡Vámonos a la Expo! Si claro pero para ir a trabajar pues como que no es lo mismo, pero me apetece enfundarme mi traje con la corbata y pensar que soy un alto ejecutivo aunque me toque instalar el software que hemos desarrollado en el pabellón de España.

Leyendo el blog de Alba se hacia una pregunta ¿Por qué los miedos? Yo la voy a modificar a ¿Para qué los fantasmas del pasado?

¿Para qué los fantasmas del pasado?

Navegando por mares de pensamientos, anegado por lágrimas de alcohol, intentando achicar los recuerdos a puñados. Vitalidad agrietada por turbios manantiales y vuelta a empezar. Palabras sin sentido para otros, cualquier normalidad en comentarios vacios, en mi cabeza rebotaban con demasiada fuerza sin parar durante horas, a veces hasta días.

Insostenible realidad que acabaría llevándome con los pies por delante, simplemente por la venda que tenía en mis ojos. La soga que sujetaba mi barco al mismo puerto, cayéndose a cachos comido por las termitas, la cuerda deshilachada, podrida de tanto sumergirse en el agua, se rompió. Solo era necesario un último tirón.

Enfundado en el nuevo traje me he enfrentado con mis fantasmas, y le acabo de traspasar por la mitad, aunque él a sabiendas me enseño su último retrato. Siempre le había funcionado, pero esta vez no. Mi espada lo sesgo y cruce al otro lado, donde ya nada puede hacer.

Ahora chapoteo en charcos, sin flechas que me alcancen. Untado en aceites ahora me resbalan los fantasmas, al menos estos que ya he aprendido a dominar. No hay nada como enfrentase a ellos aunque a veces necesites ayuda y esa la encuentras cuando menos te lo esperes.

En el horizonte, los delfines saludan con sus saltos, simplemente por haber salido a navegar.

Pues ahora una canción de Los dlinquentes y Bebe - Después


3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Para qué los fantasmas del pasado?
Podría hacer un post entero hablando sobre esto. Es más, la mitad de mi blog está repleto de fantasmas del pasado. No sé para que sirven, solo sé que están ahí haciéndote recordar una y otra vez, poniéndote la zancadilla para que caigas, poniéndose delante para que no avances, dejando que las lágrimas afloren de nuevo. Pero son fantasmas, transparentes y tan reales como tu mente lo permita.

Quitémonos estos fantasmas, atravesémoslos y vivamos con los de carne y hueso!!!!!!!!

PD: Me alegro que puedas con tus fantasmas. Yo voy ganándole varias batallas, dentro de poco habremos gnadao la guerra.

Anónimo dijo...

ña ña ña He flipado con el post. me ha encantado.

Para qué los fantasmas del pasado? para darte cuenta de que has avanzado, de que son sombras que pueden irse, y poder tocar lo material (el presente)

Un beso!!!!!!!!!!!!!

¿Para qué? dijo...

Graicas Wapas

Angemary: La verdad, yo creo que no valen para nada solo para tocar los .... xDDD. Lo bueno que tienen es que van haciendo cayo y al final ni queman ni pinchan.
Seguro que ganamos la guerra

Alba: Me alegro que te haya gustado. Ahi le has dado xDD


Bs